A veces olvidamos que la boca es la puerta de entrada de muchas enfermedades. El Doctor Miguel Alvarado nos habla de la importancia de la salud y el cuidado de la boca para proteger nuestro sistema inmunológico.
¿De qué forma influye la salud dental en nuestro sistema inmunológico?
Hay estudios recientes que demuestran de una manera muy clara que la enfermedad periodontal, por ejemplo, no solamente es aceleradora y propulsora del Alzheimer, sino que además es el mayor factor de cáncer de esófago. Incluso por delante del tabaco. También puede afectar en algunas enfermedades cardiovasculares, diabetes, enfermedades respiratorias, neurológicas… También las enfermedades a nivel de articulaciones. Es decir, esta enfermedad periodontal influye directamente en ellas, es algo que está demostrado y hay muchas publicaciones. Con lo cual, solamente hay que remitirse a ellas para poder ver la gravedad de este problema.
¿Cómo podemos evitarlas?
Es un problema interesante, porque en la enfermedad periodontal hay un factor genético y hay un factor de hábitos. Evidentemente, cuanto más se limpia el paciente y cuanto más pendiente está el odontólogo, cuantas más visitas se hacen, cuanto más bajemos esa carga de bacterias que está generando ese tipo de patología, evidentemente estamos ayudando muchísimo más a que, a nivel sistémico o a nivel general, el cuerpo no padezca o no sufra con la intensidad que debería de sufrir si bajamos esas bacterias.
Es verdad que los tratamientos periodontales muchas veces son paliativos, no curativos. La predisposición o el factor predominante es el factor genético, a pesar de que el paciente tenga muy buenos hábitos de limpieza, esa enfermedad va a seguir evolucionando. Lo único que se hace con los tratamientos periodontales es alargar la agonía del diente, que vaya perdiendo poco a poco, que se pierda muy despacio, y bajar el nivel de bacterias que va a estar complicando a nivel sistémico el resto de las enfermedades que puedan provocar estas bacterias.
¿Es importante acudir a un odontólogo en caso de sospecha de enfermedad periodontal?
Es importante ir y que éste esté constantemente encima de esta enfermedad. También es verdad que hay que tomar, en un momento determinado, una decisión, y esa decisión, a veces, es cuando el diente tiene mucha movilidad o cuando ya incluso hemos perdido mucho hueso, que va a hacer que el diente se mueva cada vez más, y que luego sea más difícil rehabilitar. Esa decisión a veces pasa por retirar los dientes a tiempo y poder eliminar la enfermedad periodontal de una manera radical y, así, poder rehabilitar al paciente totalmente.
¿La salud empieza por la boca?
Si, una buena salud empieza por la boca. Siempre se ha dicho que las enfermedades entran por la boca, más bien diría que la salud entra por la boca. Es importante tener en cuenta que la boca, desde la alimentación y desde todas las enfermedades que podamos tener, va a afectar al nivel sistémico. Entonces, tener controladas todas las infecciones, porque hemos hablado de enfermedad periodontal, pero hay otro tipo de infecciones: quistes, flemones, hay arterias y venas que están conectadas ahí, que van tragando y van pasando al torrente sanguíneo llevando todas esas bacterias y depositándolas en los riñones, en las articulaciones… Todo lo que sea evitar ese tipo de infecciones, de alteraciones en la boca que van a generar patologías a nivel sistémico, es importante tenerlas controladas. Opino que la salud empieza por la boca. Puede agravar otro tipo de patologías, como patologías cardiovasculares o pulmonares, cualquier infección que haya en la boca puede agravar éstas otras. Es interesante tener controlado muy bien todas las infecciones que puedan haber en la boca.
La prevención puede ser nuestra mejor arma contra esas patologías ¿no?
Por supuesto, no solamente la prevención en estas patologías es cuidar la boca. Evidentemente, cuando alguien tiene una vida saludable y tiene una ingesta de alimentos healthy, saludable, lleva una dieta mediterránea, hace ejercicio. Además, se hace sus revisiones periódicas en el odontólogo, no tiene foco de infección, no tiene enfermedad periodontal, evidentemente estamos, a nivel general, haciendo una gran prevención y cubriendo y protegiendo todas esas posibles patologías que pueden aparecer en un futuro. Todo lo que sea prevenir siempre es mejor que curar.
¿Que tratamientos existen para mejorar nuestra salud dental y por tanto nuestro sistema inmunológico?
Es una pregunta compleja. Realmente, los tratamientos que existen tienen el objetivo de eliminar los focos de infección. A nivel de enfermedad periodontal debemos eliminar esas bacterias que están generando esa destrucción del hueso. Entonces, eliminado esa inflamación que hay ahí, ya estamos protegiendo un poco más el sistema inmunológico, que está peleando continuamente contra esas infecciones.
Si hay quistes o flemones, infecciones que están supurando constantemente, esto genera que el sistema inmunológico esté peleando y generando esfuerzos. Cuando explico esto a mis pacientes siempre les digo que el sistema inmunológico es un ejército que tenemos ahí preparado para luchar contra todo tipo de bacterias. Ahora está muy de moda hablar de carga viral y del tipo de exposición, por ejemplo con el COVID-19. Pues esto es lo mismo. El sistema inmunológico, nuestro ejército, no distingue unas bacterias de otras, unos virus de otros. Lo que hace es detectar una bacteria o un virus que está ahí, y lucha contra él. Si nuestro sistema inmunológico está distraído o está luchando constantemente contra este tipo de infecciones que hay en la boca, lo que provoca es que esté más debilitado o tenga más recursos dedicados a un sector y descuide más otro, pudiendo provocar que entren otro tipo de infecciones u otro tipo de alteraciones.
Por lo tanto, realmente los tratamientos que deberíamos tener en cuenta para mejorar nuestra salud dental, y por lo tanto nuestro sistema inmunológico, es bajar radicalmente los focos de infección, si hay quistes, eliminar los quistes o los dientes, si hay dientes que tienen flemones o supuraciones, eliminarlos, y limpiar todos estos focos para que no se genere más infección en boca y no se altere el sistema inmunológico.
Como experto en implantes que eres, ¿De que manera estos pueden influir en esa inmunidad?
Los implantes realmente son herramientas que los dentistas utilizamos para reponer dientes. En realidad, no deberíamos usarlos sólo para reponer, sino también para rehabilitar. A veces, se puede rehabilitar a un paciente poniéndole puentes o coronas, no necesariamente poniendo implantes. Los implantes son instrumentos para poner reposiciones o poner dientes y devolverle al paciente la función que ha perdido. A nivel inmunológico en principio no afecta directamente Ahora bien, sí hemos eliminado las piezas dentales del paciente porque tenía una enfermedad periodontal muy grave, con una gran movilidad en los dientes, y hemos eliminado los dientes, con lo que también eliminamos el foco de infección, hemos protegido su sistema inmunológico, y con los implantes lo que hacemos realmente es rehabilitarlo. Darle otra vez esa función, esa fonación, esa estética que ha perdido, nada más.
¿Cómo evitar las enfermedades que influyen en nuestro sistema inmunológico?
Primero que nada, con una buena dieta, una buena alimentación, haciendo ejercicio, haciéndonos nuestras revisiones y nuestros controles con todos nuestros médicos. Sobre todo, con muchas revisiones en el odontólogo. No podemos descuidar nuestra salud dental y bucal. Creo que hay un porcentaje de la población muy bajo que está preocupado por su salud bucal, no es una prioridad, porque no entienden la gravedad de estas infecciones y de estas complicaciones. Hay muchísima gente que viene con restos reticulares, raíces dentro de la boca porque el diente se ha ido rompiendo poco a poco, y mientras pueda comer no le altera demasiado. Considero que es muy importante cambiar un poco a nivel social para estar protegido. Y para proteger bien el sistema inmunológico hay que acudir a las revisiones, tanto del médico como del odontólogo.
¿Desde que edad recomiendas que se hagan esas revisiones para evitar mayores problemas en el futuro?
Hay que tener en cuenta que los primeros que siempre cuidan de nosotros y vigilan nuestra salud son nuestros padres. Ellos son los primeros que se dan cuenta de si estamos caminando mal, si tenemos fiebre, si nos molesta algo, son los primeros que nos educan, nos enseñan a cuidarnos y cepillarnos los dientes. Con lo cual, creo que son los primeros que observan si hay algún tipo de patología o problema en la boca y diagnosticar si ven algo raro. Si al niño o niña le están saliendo los dientes apiñados o tiene las encías muy inflamadas, son los primeros en verlo, y en ese momento, ante cualquier anomalía extraña pues han de acudir al dentista.
Yo creo que una edad aceptable es a partir de los 6-7 años, que es cuando ya empiezan a salirles los dientes permanentes cuando empiezan a entender un poco más. Considero que esa es una edad interesante para hacer su primera visita al dentista, y poder familiarizarse un poco más con lo que sería ir periódicamente a las revisiones.
Además de las enfermedades mencionadas, ¿Qué tipo de enfermedades pueden estar provocadas por una mala salud dental?
Creo que casi las hemos nombrado todas. Pero destacaría el Alzheimer, el cáncer de esófago, neumonías, cardiopatías, riñones, articulaciones, diabetes… Evidentemente, también pueden provocar que aparezca más cándida, que es un hongo bastante molesto y difícil de eliminar. Todo esto está asociado a las enfermedades dentales, por eso considero que habría que cambiar un poco el concepto, creo que una buena salud general empieza por una buena salud bucal. Me gustaría cambiar un poco el concepto, es como que por culpa de una mala salud bucal, se generan este tipo de enfermedades sistémicas. Por eso, creo que la sociedad, los padres y los odontólogos deberíamos cambiar ese concepto. A partir de una buena salud bucal, tener una buena salud sistémica. Ese sería el concepto que todos deberíamos tener, encarrilarnos todos por ese camino, y eso se consigue con revisiones periódicas, estar pendientes de esas infecciones, eliminarlas y tomar decisiones a tiempo para evitar perjudicar mas el cuerpo a nivel general.
Por tanto, y definitivamente, una buena salud empieza por una buena salud en la boca.
“Una buena salud general empieza por una buena salud bucal”