Si todavía tienes dudas sobre cómo enfrentarte al cambio de temporada, toma nota porque este es tu artículo.
1. Busca un nuevo sitio a tu ropa
Lo primero que tienes que hacer es encontrar fundas tipo porta trajes o cajas en las que almacenar tu ropa.
2. Vacía todo el armario
Saca toda la ropa y deja tu armario completamente desnudo.
3. Di adiós a esas prendas que nunca han visto la calle
El paso tres, y quizás el más complicado, es despedirte para siempre de esas prendas que nunca te pones. Y, ¿qué hacer con esa ropa? No la tires. Dónala o véndela en plataformas como Vinted o Wallapop.
También puedes llevarla a un contenedor de reciclaje. Grandes cadenas de moda como H&M, Mango y Zara dan una segunda vida a tu antigua ropa. Además, podrás disfrutar de descuentos por llevar tus viejas prendas.
4. Reorganiza
Pon lo que sí te quedas encima de la cama. No te olvides de dividir todo por categorías para clasificar bien la ropa de verano.
Una vez organizado, métela lo más estirada posible (así evitarás arrugas) en las cajas o bolsas que has preparado. Etiqueta siempre tus cajas. De esta forma, no perderás la cabeza tratando de encontrar tus prendas en la siguiente temporada.
5. Limpieza a fondo
Limpia el armario. Para hacer bien tu cambio de armario es fundamental limpiarlo por dentro.
6. Di hola a las prendas de esta temporada
Saca la ropa de invierno y organízala por categorías.
7. Coloca
Esto tendrás que hacerlo poco a poco, te aconsejamos que primero empieces con aquellas prendas que vayan colgadas, por ejemplo, los abrigos.
Aunque también puedes seguir otras técnicas como colocar según uso y actividad o la opción del orden cromático. Tú decides si prefieres darle mayor importancia a las prendas que más utilices, pensando en tu ritmo y estilo de vida, horarios, etc., o si prefieres hacerlo mucho más visual y ordenarla por colores.
Una vez acabes con esto, pasarás a los cajones y baldas o estantes. Aquí irán el tipo de prendas que más vistes en tu día a día.
8. Zapatos
Una vez termines con tu armario, te pondrás <<pies a la obra>> con tus zapatos. Si no tienes hueco en el armario, puedes guardarlos en las cajas donde los compraste. Puedes guardarlas debajo de tu cama, en algún otro armario, o en un zapatero. Los tacones, mejor de pie en tus estantes, o dentro de las cajas. Para que tus botas no se arruguen, te recomendamos que introduzcas bolas de papel de periódico para que mantenga la forma del tobillo y del gemelo.
9. Prendas básicas
Y, ¿qué hacer con los básicos? Mantenlos. Tu fondo de armario te será útil durante todo el año. Camisas, blazers, chaquetas vaqueras, … Todo lo que puedas ponerte en cualquier época del año.
10. A <<vestir la vida>>
Disfruta vistiéndote con tu “nuevo armario”. Haciendo limpieza y reorganización de armario, te será mucho más fácil escoger tu ropa a diario.