“¿A Dónde Vamos?” es una pregunta que en estos tiempos nos hacemos mucho, pero también es el nombre del nuevo disco de Morat. Juan Pablo Isaza, Simón Vargas, Juan Pablo Villamil y Martín Vargas forman una de las bandas más exitosas del panorama musical y encandilan cada día con su música a más y más fans. Hablamos con ellos para que nos cuenten qué sorpresas vamos a encontrar en este álbum.
Tenéis nuevo disco “¿A Dónde Vamos?”, ¿qué va a escuchar la gente?
Yo creo que van a oír un disco que nace un poco con las líneas de sonido de “Balas Perdidas”, nuestro segundo disco, pero algo más maduro, porque originalmente iba a salir en 2020 pero por razones obvias no lo pudimos sacar, lo que nos dio más tiempo para trabajar más en él. Le cambiamos el nombre y le agregamos canciones. Es un disco que habla un poco de lo que nos está pasando ahora ¿a dónde vamos? Yo creo que a nadie del planeta tierra no se le ha pasado esa pregunta por la cabeza.
Vosotros componéis vuestras propias canciones, ¿de qué hablan las de este disco?
Este disco tiene un tono más positivo, hacer canciones de desamor es mucho más fácil que hacer canciones de amor y las canciones felices son más difíciles de hacer. Pero este álbum, pese a tener canciones de desamor, son más positivas que otras veces, eso ha cambiado a la misma vez que nosotros también hemos crecido. Está hecho para ver la positividad de vivir un desamor, pensando en lo bueno que va a salir de superarlo.
¿Cómo es la sensación de sacar un álbum?¿Con qué lo comparáis vosotros?
Es un momento de liberación, porque cuando sacas algo en lo que llevas mucho tiempo invertido, musicalmente y gráficamentem emociona mucho. Además, justo cuando presentamos el disco también salimos de gira por España y luego por EE. UU. La sensación del lanzamiento es de orgullo, emoción y ¡ganas de que la gente lo oiga ya!
Además habéis arrancando con la nueva gira, el día 30 de julio estáis en Valencia, ¿teníais ganas de volver a estar cerca del público?
¡Infinitas! Nosotros llevamos 4 años con un ritmo de gira vertiginoso y muy agresivo, no pasamos más de 3 semanas en ningún lugar y de pronto pusimos el freno de mano, tocó parar y nos detuvimos un año y medio, y aunque fue una situación muy fuerte nos dio aire y espacio para relajarnos y recargar energías y ahora las ganas de volver a tocar en vivo son absolutas, estamos súper motivados para volver a tocar.
¿Cómo es el público valenciano?
Diríamos que el público valenciano es absolutamente espectacular, todas las veces que hemos tocado ha salido súper bien, nos tienen mucho respeto y a parte tienen toda esa energía que aporta la costa mediterránea, una energía particular, tienen esa vibra que se siente mucho a la hora de tocar y actuar para ellos en el concierto.
Habéis colaborado con artistas como Danna Paola, Sebastián Yatra, Beret, Aitana, Paulina Rubio… ¿soléis ser quienes levantáis el teléfono u os llegan a vosotros las propuestas?
La verdad es que siempre varía, hay colaboraciones que proponemos nosotros porque nos apetece hacer algo con esa persona y hay veces que nos lo proponen.
Os conocéis desde el colegio, de hecho en aquella época ya formasteis la banda y tocabais en las fiestas del fin de año y en algunos conciertos, ¿echáis de menos no ser conocidos?
¡Yo creo que no! Nuestro sueño era este, poder vivir de la música y viajar con amigos por el mundo dando conciertos. De no haberlo conseguido igualmente estaríamos tocando pero sería otra cosa, nosotros siempre hemos hecho esto por la música. No te voy a mentir diciendo que no amamos lo que estamos viviendo ahorita, es una cosa que llena mucho el corazón.
Os pasa que escucháis canciones de vuestros anteriores discos y decís, ¿cómo pude componer eso?
No, creo que no, aunque nosotros no solemos escuchar mucho nuestra propia música, ya es suficiente con oírla en el concierto un montón de veces y por eso no nos pasa -risas-. Pero nosotros les tenemos mucho cariño a nuestras canciones, porque cada una de ellas en su momento tuvo sentido como composición.
¿Tenéis alguna manía antes de subiros al escenario?
No, la verdad es que somos poco supersticiosos.
¿Alguna vez habéis tocado en privado para alguien muy famoso, que os ha contratado, pero no podéis decir quien?
Mmm sabes que no, ahora que lo pensamos no, nosotros hemos tenido la suerte de tocar en eventos privados y en fiestas para gente muy querida y divertida pero sin famosos ni secretos -risas-.