La firma valenciana de joyería Marfil Joyeros amplía su exposición con un local situado en la calle Cirilo Amorós 41, en la esquina más animada de Hernán Cortés.
El proyecto de interiorismo, llevado a cabo por el estudio Mercader de Indias, se inspira en el Nueva York creado por el arquitecto valenciano Gustavino (1842-1908).
Arcos y bóvedas se suceden en la nueva joyería del grupo Marfil, con techos que simulan las baldosas de la galería de los susurros de la Estación Central de la gran Manzana. El interiorista Carlos Serra hace tributo a la obra de este ilustre valenciano en la nueva Joyería Marfil. Materiales nobles como la madera de roble, la piedra y el mármol marquina recorren este espacio convirtiéndolo en el estuche perfecto para la impresionante colección de joyas expuestas.
Un sofá redondo en terciopelo y una sutil lámpara dan la bienvenida a este espacio divido en cuatro puntos de atención al cliente marcados por grandes alfombras negras. Pequeñas bóvedas en las paredes, diseñadas como vitrinas para las joyas y una iluminación muy puntual de la mano de Le Corbusier con su modelo Marseille crean un ambiente sofisticado y sereno en el que parece que el tiempo se detenga para disfrutar de la belleza de las piezas de joyería de Marfil y sus piedras preciosas.
El exterior y los escaparates buscan la complicidad con los paseantes.
Un espectáculo de casitas de colores, trabajadas en papel con todo lujo de detalles, son obra del estudio Bomarzo. Un homenaje al mundo de los cuentos, la ilusión y los sueños, llaman la atención de adultos y niños. Los 3 escaparates muestran las distintas líneas de joyería de la firma Marfil.
La cabaña de la Selva Negra, con sus abetos y bosques, esconde pendientes y collares de la Colección “Bronce y Oro” en una línea de precio muy asequible, de 90 a 200eu.
Las casitas con vigas de madera, son una réplica de las “maisons à colombages” y en sus callejuelas se muestra la línea de colgantes y sortijas en oro y brillantes de la línea Minimal. Un tipo de joya para usar a diario, apropiado para todas las edades.
Para la Alta joyería, se ha escogido un decorado inspirado en las fachadas renacentistas de la Grand Place de Bruselas.
Los hermanos Marfil se afianzan con esta apertura como la firma de joyería valenciana de mayor proyección. Sus dos locales, situados en Cirilo Amorós y separados por apenas 100 metros, nos permiten hacer un recorrido por la historia de la alta joyería.
En Marfil Heritage, la joya vintage es protagonista, mientras que Marfil 1978 encontrará las últimas tendencias y los diseños más actuales.