Conocido por sus famosas bromas en “Anda Ya” de los 40 Principales, se encuentra en un “Kit Kat” profesional para centrarse en su vida familiar. A medio camino entre Madrid y Valencia, visita hello Valencia para contarnos su pasado, presente y futuros planes y proyectos en los que se encuentra. Con ganas de volver a escucharle a través de la radio, descubrimos que quizás no pase mucho tiempo para que retome las ondas.
¿Qué hace actualmente Valeriano Campillos?
Ahora mismo estoy escribiendo un segundo libro, después de “Fuet o no fuet, esa es la cuestión”, que funcionó bastante bien… El primero era una especie de historia mía de cuando llegué a Madrid, que recopilaba monólogos independientes en plan historia. Ese libro salió en 2009 y no había escrito hasta ahora, con motivo de una circunstancia personal. Mi madre ha enfermado de un cáncer, y propuse a mi editorial un libro sobre una persona que trabajaba en Madrid y en uno de sus viajes a Valencia su madre enferma. Cuenta las vivencias del protagonista con su madre, de la cual se había alejado porque llevaba viviendo 20 años fuera y se encuentran ahora.
Entonces, ¿no encontramos humor en el libro?
No, no es cómico ni cachondeo, pero si se pretende tocar el cáncer desde un punto de vista más cotidiano, respetando la enfermedad pero dando esperanza, porque del cáncer se sale. No todo el mundo, pero si se sale. No es humorístico ni morboso, se toca la enfermedad con anécdotas que, aunque la enfermedad es grave, hay situaciones que siguen siendo graciosas.
El cáncer te ha dado la oportunidad de volver a reencontrarte con tu madre….
Sí, y sobre todo, me ha hecho encontrarme en un momento en el que estoy “descuidando” un poco mi lado más profesional, y enriqueciéndome mucho a nivel personal. Estoy redescubriendo a mi madre, me he reencontrado con mis hermanos… Un cambio personal porque estoy dando importancia a las cosas que realmente la tienen.
¿Y la radio?
Estaba en “Las mañanas de Radio Nacional” con Alfredo Menéndez, pero eso me exigía estar en Madrid y hemos hecho un parón, un “Kit Kat”, pero quiero volver a la radio en cuanto pueda. Es algo que me encanta, me lo pasaba muy bien en la radio, tanto en el morning show de los 40 Principales como después en Europa FM. En 2010 decidí frenar porque llevaba muchos años levantándome a las 4 y media de la mañana, estaba agotado… y me puse a escribir monólogos y pequeñas obras para microteatros. Luego volví a la COPE, hice bromas telefónicas en Sálvame, después Radio Nacional…
¿Te planteas hacer monólogos?
Durante mi época en 40 Principales hice algunos monólogos y luego si que me he planteado hacer algún espectáculo. De hecho, tengo algo escrito, “Valeriano para dormir”, una serie de cuentos así picantones para alumnos, con alguna historia que puede tener éxito. No he tenido tiempo pero puede que me siente un día a escribir, lo haga durante un mes y consiga un monólogo que pueda tener éxito.
Hice bromas también para Inocente-Inocente, hasta el punto de que mi cara estaba tan vista que ya no me la podía jugar, ya que muchos famosos ya me conocían. Allí me lo pasaba genial.
De todo lo que has hecho, ¿con que te quedarías?
Me quedo con la radio, siempre. Antes se decía que la radio era la hermana pobre de la tele, pero ahora yo creo que son gemelas. En la radio me lo he pasado infinitamente mejor que en la televisión y espero seguir haciendo radio muchos años. Una radio que me divierta, que me haga sentir parte del equipo y aportar todo lo que pueda.
Quieres volver a la radio, pero ¿de qué manera?
Se dice que está todo inventado, pero puedes cambiar cosas, coger cosas que funcionan… A mi me gustaría hacer un programa gamberro de madrugada, “Valeriano para dormir” en radio. Tocar temas que no se pueden tocar durante el día, reportajes, entrevistas, oyentes muy participativos y con bromas telefónicas. Los fines de semana, como Gomaespuma, en una radio musical me gustaría más. Me gusta hacer radio para gente joven, con gente joven que hay ahora con un talento impresionante. Buscar un gran equipo.
¿Cuál es la mejor broma que recuerdas?
Me he reído con muchas pero hay una que fue tremenda. Yo llamaba a una floristería de Sevilla, desde “El Circo Campillos”, porque mi domador de focas se había muerto atacado por las focas. Yo quería encargar unas coronas de flores y la mujer se puso en mi situación. Le conté la situación y ella me dijo que se hacía cargo de todo. Empecé a decirle las frases de las coronas de flores del estilo de “El niño cenicero te quiere con esmero…”, y frases con rima. Ella lo apuntaba todo, y ¡me lo repetía! Llegó un momento en que me entra la risa y ella pensó que ¡estaba llorando! La pobre se lo creyó todo y se unió a mi llanto. Fue una broma genial.
En Inocente-Inocente también le hicimos una broma a Fernando Tejero, que no podía aguantar la risa. Le llevamos al Centro de Investigación del Cáncer de Madrid y habíamos descubierto una máquina que convertía elementos, y yo era un científico. Después de convertir cáscaras de naranja en canapés de jamón y bombillas en una cazadora… me metí en la máquina porque se había atascado y ¡me convirtieron en nevera! Pusimos un altavoz dentro y Fernando Tejero se creyó que me había convertido hasta que se abrió la nevera y salió el ramo de dentro.
Las bromas se consiguen porque hay un gran trabajo detrás. Unos grandes actores, unos escenarios, y mucha gente que hace que si eres víctima de una broma, te suene raro pero te lo creas porque la preparación es increíble.
¿Has sido víctima de alguna broma?
Soy un poco especial, porque me gusta hacer bromas pero no me gusta que me las hagan. Me intentaron hacer una mis amigos, durante una época que coincidía mucho con Chenoa. Un día lo comenté en la radio y después, mis compañeros de Europa FM me prepararon una broma, me llamaron y me dicen que se han enterado de que tengo una relación con Chenoa y que va a salir en “Sálvame”, que hay fotos y demás. Pero les salió mal, porque yo dije que no tenía nada que hablar con ellos y colgué. Intentaron varias veces llamarme pero nada, no lo consiguieron.
¿También has trabajado de actor?
Cuando llegué a Madrid trabajé en “Aladina” con Paz Padilla y Miriam Diáz Aroca de coprotagonista. En películas he hecho papeles pequeños, como en “El Bola”. Luego descubrí el mundo de la radio y me acomodé a ella. Estoy pensando en resucitar a mi parte de actor porque me apetece explorar esa faceta mía, principalmente en los microteatros. Lo último que he hecho es un papel en “Estirpe”, una película de bajo presupuesto que se estrena próximamente, con Joaquín Reyes y Sergio Peris-Mencheta, entre otros. Además, les gusté como actor y al final me dieron más protagonismo.
¿Cómo ves el panorama radiofónico actual?
La situación está mal para todo. Además, la radio privada se alimenta de la publicidad y ahora está muy complicado por la desaparición de pequeñas y medianas empresas. Además, no todo el mundo puede vivir de las grandes empresas que se anuncian en medio de comunicación. Lo veo complicado, también por parte de los anunciantes, que se aprovechan de ello para apretar a los medios. Es difícil pero con gusto y ganas, todo el mundo tiene su oportunidad. Si propones, eres inquieto y novedoso, está complicado pero hay que intentarlo.
hello Valencia, la guía líder de restaurantes y ocio en Valencia