Con la llegada del verano, toca ir a la playa o la piscina y apetece lucir bronceado. Para ello, muchas personas utilizan aceleradores del bronceado. Pero ¿es realmente la zanahoria uno de ellos?
La creencia parte de la base de que poseen micronutriente capaz de lograr dicho bronceado. ¿El problema? No se adquiere el típico moreno de rayos de sol. La zanahoria no tiene efecto alguno relacionado con la activación de la melanina.
Aunque el mito parte de una realidad que sí es cierta: consumir una cantidad considerable de zanahorias y de manera constante puede provocar un cambio en la coloración de la piel, pero ésta adquirirá una gradación anaranjada. La explicación se encuentra en una de las propiedades que posee dicha hortaliza: el betacaroteno (una provitamina A), cuyo contenido es muy alto y aporta multitud de antioxidantes.
Pero no es el único alimento que colorea, también lo hacen las calabazas, los boniatos, los tomates, la sandía, los pimientos rojos y las papayas.
Para lograr, no obstante, un bronceado duradero, hay que acudir a la playa o la piscina, exponerse a los rayos del astro rey y no olvidarse la crema solar.