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LIFESTYLE

ne un aumento de superior al 200% en los, hay una pastillita azul que nos ayu-
los últimos quince o veinte años. Hagan dará a sobrellevarlo. Y si esa no funciona,
las cuentas y concluyan quién se lleva la no pasa nada, las tenemos de todos los
colores.
pasta y quién sale perjudicado. Podemos denunciar la perversidad de las PARA
Por supuesto, los psicofármacos están co-
rrectamente indicados en ciertos casos, empresas farmacéuticas que, en definiti-
pero para nada en tantos ni de forma tan va, hacen lo suyo: ganar cuanto más di- LEER
masiva. Además, ha quedado demostrado nero, mejor. Podemos criticar un sistema
que muchos de los medicamentos pre- sanitario que asfixia y deja poco margen
de maniobra a los profesionales. Podemos
enfadarnos con algunos médicos que no La invención de los tras-
MUCHOS DE LOS quieren escuchar lo que de verdad le pasa →tornos mentales. Marino
Pérez, catedrático de Psicolo-
a su paciente y le tapan la boca con pas-
MEDICAMENTOS tillas. Pero al final de la línea está usted gía (Universidad de Oviedo)
PRESENTADOS como último responsable de su salud y la y Héctor González, profesor
COMO NOVEDAD de sus hijos. Usted puede elegir si quie- de Psicobiología y Psicofar-
NO APORTAN re saber qué le ocurre, tener la valentía macología (Universidad de
NADA NUEVO Y, EN de afrontarlo y salir adelante o si, por el Oviedo).
MUCHOS CASOS, LOS contrario, prefiere conformarse y decir ¿Somos todos enfermos
“yo sin pastillas no puedo vivir” (que es
PERJUICIOS SOBRE equivalente a lo que algunos psiquiatras → mentales? Manifiesto con-
LA SALUD DEL afirman sin pruebas: “lo suyo es para toda tra los abusos de la psiquia-
PACIENTE SUPERAN la vida”) convirtiéndose en un paciente tría. Allen Frances, catedrá-
A LOS SUPUESTOS crónico. tico emérito de Psiquiatría
(Universidad de Durham,
Antes de ir a por la receta, párese a pen-
BENEFICIOS sar si usted tiene algo que ver en su su- EE.UU).
frimiento y puede hacer algo al respecto.
Sea crítico y no se fíe de lo primero que Anatomía de una epide-
sentados como novedad no aportan nada
nuevo respecto de los anteriores y que, en le digan. Y, desde luego, salga pitando si → mia. Medicamentos psi-
muchos casos, los perjuicios sobre la sa- alguien le quiere meter una pastilla en la quiátricos y el asombroso au-
lud del paciente superan a los supuestos boca sin ni siquiera preguntarle cómo se mento de las enfermedades
beneficios. llama. En definitiva, es usted quien debe mentales. Robert Whitaker,
decidir. ■
Por otra parte, se sabe que la psicoterapia periodista de investigación.
y el acompañamiento social reducen o Doctor en psicología
incluso hacen innecesario el uso de me- Psicólogo clínico Medicalizar la men-
dicamentos. Si parte del dinero que se carlos-garciagarcia@hotmail.com → te. ¿Sirven de algo los
gasta el Estado en pastillas lo dedicara a tratamientos psiquiátricos?
contratar psicoterapeutas y trabajadores CADA PERSONA Richard Bentall, profesor de
sociales, no tendríamos a tantos médicos PUEDE ELEGIR SI Psicología Clínica (Universi-
y pacientes enganchados a la receta sino QUIERE SABER QUÉ dad de Liverpool).
a más personas con recursos para vencer
por sí mismos el dolor psicológico. LE OCURRE, TENER Hablando claro. Una
Pero vivimos en una sociedad consumista LA VALENTÍA DE → introducción a los fár-
con muy baja tolerancia a la frustración, AFRONTARLO Y macos psiquiátricos. Johana
que no sabe esperar y corre desesperada- SALIR ADELANTE Moncrieff, profesora de Psi-
mente hacia el espejismo de la felicidad y O SI, POR EL quiatría (University College,
la normalidad, ideales de perfección que Londres).
nos venden como posibles pero que ni CONTRARIO,
existen ni existirán. Es paradójico que, a PREFIERE Psicofármacos que matan
mayor nivel de progreso, la gente más se CONFORMARSE → y denegación organizada.
entristece, se irrita, se pone nerviosa y se Y DECIR “YO SIN Peter Gøtzsche, catedrático
queja. No es que exista una plaga de en- PASTILLAS NO de Diseño y Análisis en In-
fermedades mentales, sino que cada vez vestigación Clínica (Universi-
somos más débiles y aguantamos peor los PUEDO VIVIR” dad de Copenhague).
inconvenientes de la vida. Pero, tranqui-

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